Hace tres años, la II Edición de los premios Optimistas Comprometidos, organizados por Anoche Tuve un Sueño, supuso un paso hacia delante para Marta, Indara y Celia, empresarias de El Sofá Amarillo -un estudio integral de organización de eventos y planes de boda-, que se sintieron totalmente inspiradas por todo lo que escucharon y aprendieron en la gala y que, al día siguiente, en el tren, volviendo a A Coruña, decidieron que una de las prioridades de su compañía en ese año sería desarrollar su propio proyecto de Responsabilidad Social.
‘Era algo que siempre habíamos querido hacer; nos faltaba ese pequeño empujón y la gala OC nos lo dio’. Apasionadas por su trabajo, y por hacer del día en que se unían las parejas en matrimonio el momento más especial de sus vidas, compartían el amor por las ideas imposibles, por pensar más allá del límite establecido y por no tenerle miedo a nada. Sentían que querían ir un paso más allá y poder equilibrar la frivolidad que en ocasiones se transmite
en el mundo de las bodas, con un proyecto totalmente altruista, en el que pudieran aportar su talento, su esfuerzo y su ayuda.
El segundo paso que dieron, fue buscar un proyecto con el que se sintieran identificadas, que les moviera el compromiso de hacer lo imposible y que tuviera que ver con niños, familias y mujeres. Les apetecía encontrar una
organización que actuara tanto a nivel local en España como en algún país en vías de desarrollo. Y aunque al inicio no aparecía ninguna causa que respondiera a sus anhelos, gracias a la doctora Lorena Bembibre, amiga de El Sofá, y voluntaria de Ecodesarrollo Gaia, tuvieron claro que sería con ellos con quienes iban a colaborar y a poder aportar algo verdaderamente significativo, a través de su compromiso. Se enamoraron de su labor, fue amor a primera vista.
Ecodesarrollo Gaia es una organización sin ánimo de lucro para el desarrollo sostenible, que desde hace 27 años, trabaja en el marco de los derechos humanos, la no violencia, la igualdad y la prevención de la violencia de género, la defensa del medio ambiente, la equidad norte-sur, la equidad intergeneracional, la inmigración, el codesarrollo y la cooperación internacional y la paz.
Concreta su labor en dos grandes áreas. En A Coruña desarrollan actividades de mediación sociocultural y laboral con inmigrantes, ayudándolos durante su proceso de integración en el nuevo entorno. Entre las que se incluyen la educación a sus familias y la alfabetización y atención integral a mujeres y a niños.
Y también llevan a cabo, en la localidad senegalesa de Yoff, importantes proyectos de desarrollo comunitario. Esta segunda área fue sin duda la parte del proyecto de Ecodesarrollo Gaia, que más les emocionó y con la que soñaron implicar, no solamente a los clientes de su empresa, sino a aquellas parejas que buscan un regalo solidario para el día de su boda.
El tercer paso fue canalizar esta ilusión a través de la iniciativa amarilla: ‘Un sofá en Senegal’, gracias a ella desarrollan distintos proyectos para que las parejas a las que ayudan y toda persona que quiera formar parte de la gran labor de la ONG en Yoff, pueda sumarse y colaborar. Los lápices solidarios de ‘El sofá amarillo’, son el primer proyecto que han puesto en marcha.
Estas mujeres optimistas y comprometidas, creen que la educación es la única manera de cambiar el
mundo. Educar en paz, igualdad de oportunidades, seguridad alimentaria o sostenibilidad ambiental, y consideran que es fundamental para garantizar el futuro de la sociedad y favorecer que, tanto los niños como sus madres, reciban una educación de calidad para poder ser independientes.
Querían crear un símbolo que representara la labor educativa de Ecodesarrollo Gaia en Yoff, para que las novias y novios amarillos, y todos aquellos que quisieran colaborar con la causa, pudieran participar llevándose además un bonito recuerdo.
‘Por eso apostamos por los lápices, con la idea de que quien lo reciba como regalo escriba con él el principio de una nueva historia’. La totalidad de los beneficios que obtienen a través de la venta de estos lápices, repercute directamente en la construcción y equipación de la biblioteca de la escuela Coruña, en el pueblo de Yoff, próximo a Dakar.
Así, y una vez consolidado el proyecto, en noviembre del pasado año, dieron otro paso más: participaron en Coruña Cura, una expedición sanitaria anual, en un viaje de cooperación integrado por quince profesionales sanitarios que, durante dos semanas, atendieron a más de 300 pacientes en Yoff salvando vidas, con medios limitados y pasión ilimitada.
Marta y Celia fueron acogidas en el grupo como personal de apoyo en tareas organizativas del hospital de campaña en la escuela Coruña. Durante doce días pudieron ver cómo cada céntimo, cada lápiz, cada esfuerzo, se ha traducido en mejorar un mundo en el que, con muy poco, todo es mucho mejor. Porque dice Mito Fernández-Obanza, Secretario de Ecodesarrollo Gaia y gran inspirador de esta realidad que han creado: ‘solamente nada es poco’.
Esta es la historia de este sofá acogedor, comprometido y amarillo, una empresa pequeña que priorizó
su deseo de ayudar. Y paso a paso, fueron sembrando este sueño, hasta hacerlo realidad. Sueño que
inició Indara y que continúan regando con su ilusión, optimismo, compromiso y amor Marta y Celia.